
Con asistencia masiva se realizó en Cali el estreno del documental La Salsa Vive, una producción dirigida por el cineasta caleño Juan Carvajal, que traza un recorrido por la historia, la transformación y la vigencia de la salsa como fenómeno musical y cultural.
Recordando su protagonismo en lugares clave como Puerto Rico, Nueva York y la ciudad donde fue presentado, también conocida como La Sucursal del Cielo. En una premier que reunió a destacadas figuras como los músicos Henry Fiol, Ángel Lebrón, Alfredo Linares y el Grupo Niche. También participaron actores caleños como Fernando Solórzano y Martha Bolaños, el músico Felipe Bravo de la banda de rock Superlitio y el director de cine Antonio Dorado.
La Salsa Vive propone una reflexión sobre el estado actual del género y parte de la hipótesis de que mientras que la salsa ha perdido protagonismo en algunos territorios como Nueva York o Puerto Rico, sí se ha mantenido vigente en Cali. Lugar donde ha evolucionado hasta convertirse en un eje articulador de la economía creativa local, así como en una fuente de identidad colectiva y una herramienta de cohesión social.
La obra incluye testimonios de leyendas de la salsa como Rubén Blades, Willie Rosario, Samuel Formell, José Aguirre, Francia Elena Barrera y Johnny Dandy Rodríguez, entre otros. Además, incorpora imágenes de archivo de exponentes históricos como Larry Harlow, Alfredo “Chocolate” Armenteros y Jairo Varela, fundador del Grupo Niche.

La narrativa del documental se desarrolla entre Puerto Rico, Nueva York y Cali, con esta última marcando el eje central de la historia. A través de relatos y entrevistas, se muestra cómo desde los años 40 y 50, Cali ya se conectaba con la música afrocubana y caribeña a través de emisoras como Radio Habana, lo que habría sentado las bases para el gusto musical que más tarde se consolidaría con el nombre de “salsa”.
Uno de los aportes analíticos más significativos que tiene la película es la definición de la salsa como un concepto musical híbrido. Por ejemplo, Larry Harlow la describe como “música afrocubana con un poco de jazz neoyorquino”, mientras que Johnny Dandy Rodríguez atribuye a la Fania All Stars el mérito de haber popularizado globalmente ese sonido, gracias a la fusión entre el jazz y los ritmos tradicionales del Caribe.
El documental también hace referencia a Buenaventura como un puerto clave en la llegada de la salsa a Colombia y su posterior establecimiento en Cali como “segunda cuna” del género. Además, se destacan fenómenos sociales locales como los “aguaelulos” y los “bailes de cuota”, donde los jóvenes del barrio se reunían a bailar, y en los que se popularizó reproducir los discos a 45 revoluciones por minuto, haciendo los temas más rápidos y atractivos para el público caleño.
La producción subraya cómo, tras el declive de la salsa dura en Nueva York en los años 80 —coincidiendo con la irrupción del merengue y la salsa romántica—, Cali no solo ha mantenido vivo el género, sino que lo ha adaptado a sus propias dinámicas culturales y económicas: escuelas de baile, casas de producción musical, y espectáculos como los presentados en eventos internacionales, incluyendo el Super Bowl 2020, con participación de 24 bailarines del grupo de Luis “El Mulato” Hernández, son ejemplo de esa continuidad.
Durante el evento, el director Juan Carvajal expresó que su intención fue mostrar cómo Cali ha mantenido viva la salsa a través del compromiso de su gente: “en Cali, tenemos bailarines, bailadores, melómanos, coleccionistas, músicos y muchos otros roles que integran un ecosistema que no existe en ningún otro lugar”.

El alcalde de la ciudad Alejandro Eder también intervino durante la noche del estreno y señaló que este tipo de producciones refuerzan la estrategia de reconciliación y cohesión de la ciudad: “hoy, una vez más, están los ojos del mundo en Cali por lo que somos: cultura. Apoyar este trabajo es avanzar en la reconciliación de nuestra ciudad y nada nos une más que el amor por la salsa”.
Por su parte, Mabel Lara, secretaria encargada de Turismo y Desarrollo Económico, destacó que este documental es parte de la estrategia de posicionamiento de Cali como destino turístico cultural: “estamos convencidos de que esta hoja de ruta, trazada a partir de nuestra identidad salsera, representa grandes beneficios para la ciudad”.
La Salsa Vive, producido por la productora caleña 64A Films de Diego Ramírez y Nancy Fernández, pretende ser un referente audiovisual del ecosistema cultural que gira en torno a este género. Más allá del legado musical, la obra destaca la capacidad de la salsa para generar empleo, promover el turismo y ofrecer alternativas de vida a través del arte, especialmente para jóvenes de sectores vulnerables.
En palabras de Rubén Blades, uno de los entrevistados principales: “el género no muere, eso es cuento. Yo no sé a quién se le ocurre decir que muere. Nada muere si se mantiene vivo a través de las acciones de muchísimas personas. La salsa está por todas partes y continuará”.
