
En el año 2000, Thalía presentó el disco con el que le dio la bienvenida al nuevo milenio y consolidó su estatus como una de las grandes estrellas de la música latina. Con el lanzamiento de Arrasando, la cantante mexicana no solo presentó un álbum que fue un éxito comercial, sino que funcionó como parteaguas para su carrera y la música pop latina en general.
Lanzado el 25 de abril, bajo el sello EMI Latin, Arrasando mostró una faceta más madura y experimental de Thalía. Si bien ya era una estrella consolidada en el ámbito de la música y la televisión mexicana, este álbum significó una nueva etapa en su carrera y llevó su música a un público aún más amplio.
El disco, con un total de 12 canciones, fusionaba diversos géneros, desde el pop latino y el dance, hasta el R&B y los ritmos latinos, con lo que se permitió conectar con una audiencia mucho más diversa, mientras ponía su nombre en la vanguardia de la música del nuevo milenio.
El impacto de Arrasando fue inmediato. El álbum se mantuvo durante dos semanas en el primer puesto de la lista Latin Pop Albums de Billboard y llegó a la cuarta posición en Top Latin Albums. Pero fue su sencillo «Entre El Mar Y Una Estrella» el que realmente marcó el pico del éxito, la canción alcanzó el primer lugar en las listas Hot Latin Songs, Latin Airplay y Latin Pop Airplay, convirtiéndose en uno de los éxitos más grandes de su carrera.
Otros temas como «Arrasando», «Regresa A Mí» y «Rosalinda» también lograron posicionarse en las listas.
Lo que hizo especial a Arrasando no fue solo su éxito comercial, sino también su enfoque innovador. Con la producción de Emilio Estefan (Shakira, Jennifer Lopez), Roberto Blades (Gloria Estefan, Marc Anthony) y Kike Santander (Luis Miguel, Rocío Dúrcal) y la colaboración activa de Thalía, en la composición de ocho de las doce canciones, el álbum ofreció una mezcla de sonidos frescos que no eran tan comunes en ese momento. Arrasando representó una forma de experimentación dentro del pop latino, con una fusión de géneros que se sentiría aún más común años después, pero que en ese momento representó una novedad.
A pesar de haber sido un proyecto que se gestó en medio de otras ocupaciones de Thalía, como su participación en la telenovela Rosalinda y la película Mambo Café, el tiempo de producción del disco se tradujo en un material muy pulido. El álbum recibió varios premios y reconocimientos, entre ellos el Latin Grammy a la mejor ingeniería de grabación, y fue certificado en varios países con más de 2 millones de copias vendidas a nivel mundial. En los Estados Unidos, fue certificado con doble disco de platino por la RIAA, y en México, alcanzó el disco platino.
El éxito de Arrasando también tuvo un impacto duradero en la industria. Con este álbum, Thalía no solo logró posicionarse como una de las artistas más influyentes de la música latina, sino que abrió puertas para futuros artistas que buscarían mezclar diferentes estilos en su música.
Por ejemplo, Karol G y Danna Paola han compartido con el público la influencia del álbum en sus propias exploraciones artísticas. Además, el álbum evidenció la evolución del pop latino a principios del siglo XXI, en un momento clave, cuando las fusiones musicales comenzaban a definir la dirección de dicho género.